Unas fotos improvisada, de mi cuñada Macarena vestida de mantilla, guapisima.
viernes, 31 de mayo de 2013
jueves, 23 de mayo de 2013
Unas palabras para Rosario
Estas palabras las escribieron para mí, y la verdad que me llego al alma, quería compartirlo en mi blog, para todo aquel que lo quiera leer.
Ana Rodriguez Gallardo
12-05-13. La Salve se reza en la calle, no aguantan más. Momentos llenos de emociones y recuerdos que dejan abierto el corazón de par en par, pero sin duda, lo mejor de esta noche, ha sido, además de mi Patrona, radiante como siempre, mi sobrino, quien con apenas dos años se refregaba una y otra vez los ojitos y mientras bostezaba su carita me llegaba al alma cuando al preguntarle mil veces ¿tienes sueño ya? Negaba rápido con la cabeza diciéndome a hombros de su padre, no tita y seguía tirándole besos a la Virgen.
Yo este año había decidido no hacer el traslado, me traía demasiados recuerdos tristes de alguien que me falta. Cuando ella llegó a mi pueblo en agosto, me pesó no haberla acompañado y juré hacerlo a la vuelta con mi amiga incondicional Rosario Moreno, en quien encontré siempre a alguien muy parecido a esa persona que ya no tengo conmigo. Han pasado nueve meses, bastante rápido, y ha llegado mayo, pero los mismos recuerdos tristes de antes me han tenido paralizada la fe y a pesar de que mi amiga, días antes, me lo propuso insistentemente una y otra vez, mi respuesta a través de varias escusas fue un no.
Su pequeña cumple un año y no encontraba el día propicio para celebrarlo, tras mi “no” decidió hacerle una fiestecilla hoy, día 12, domingo del traslado.
Y ya voy llegando donde quiero llegar. Vuelvo a las emociones de anoche, cuando mi hermano se llevó a mi sobrino rendido por el sueño, yo quise quedarme un rato más y despedirla a mi manera, pero una de las muchas veces que me vi frente a mi Pastora, a escasos centímetros cara a cara con ella, que es donde me gusta estar, mi corazón dio un vuelco, se me encogió el estómago, tenía los vellos de punta y en mi interior sentía que los ojos de la Virgen me decían “vente conmigo”. Se me saltaron las lágrimas y en ese momento volví a casa con la intención de recoger mi medalla, mis botos y una mochila y encontrarme de nuevo con ella antes del alba. Regresé a casa, lo preparé todo y me tendí a descansar un poco antes de mi marcha; por si me quedaba dormida activé una alarma para las cinco de la mañana. Pues bien, media hora antes de que sonara me desperté, miré el reloj y pensé “es hora de levantarse, mi Pastora me está esperando”. Al poner los pies en el suelo sentí un escalofrío intenso que me llegó al alma y también pensé, “mi amiga también me está esperando, es el cumple de su niña y se quedará esperándome toda la tarde, mi amiga, la que comparo mil veces con la hermana que se me fue, la que siempre está ahí, la que nunca me falla, aquella con la que en agosto juré que haría el camino de vuelta, la misma a la que hace dos días dije que no tenía ánimos de ir al traslado ¿cómo iba a irme sin ella?¿cómo iba a dejarla esperando?
Y resulta que…..como las cosas pasan porque tienen que pasar……..mientras a mi Virgen le tapaban la cara al amanecer entre vivas y sonidos de escopetas yo estaba en casa, llorando, con un boli en la mano y sobre papel mojado escribía estas letras.
Supongo que desde lo más alto comprenderán que aunque me arrepienta durante siete años, no podía hacerlo y que en este caso el valor de la amistad también puede verse como amor a la Virgen. Perdóname……..te debo una Rocío, mi Rocío.
Yo este año había decidido no hacer el traslado, me traía demasiados recuerdos tristes de alguien que me falta. Cuando ella llegó a mi pueblo en agosto, me pesó no haberla acompañado y juré hacerlo a la vuelta con mi amiga incondicional Rosario Moreno, en quien encontré siempre a alguien muy parecido a esa persona que ya no tengo conmigo. Han pasado nueve meses, bastante rápido, y ha llegado mayo, pero los mismos recuerdos tristes de antes me han tenido paralizada la fe y a pesar de que mi amiga, días antes, me lo propuso insistentemente una y otra vez, mi respuesta a través de varias escusas fue un no.
Su pequeña cumple un año y no encontraba el día propicio para celebrarlo, tras mi “no” decidió hacerle una fiestecilla hoy, día 12, domingo del traslado.
Y ya voy llegando donde quiero llegar. Vuelvo a las emociones de anoche, cuando mi hermano se llevó a mi sobrino rendido por el sueño, yo quise quedarme un rato más y despedirla a mi manera, pero una de las muchas veces que me vi frente a mi Pastora, a escasos centímetros cara a cara con ella, que es donde me gusta estar, mi corazón dio un vuelco, se me encogió el estómago, tenía los vellos de punta y en mi interior sentía que los ojos de la Virgen me decían “vente conmigo”. Se me saltaron las lágrimas y en ese momento volví a casa con la intención de recoger mi medalla, mis botos y una mochila y encontrarme de nuevo con ella antes del alba. Regresé a casa, lo preparé todo y me tendí a descansar un poco antes de mi marcha; por si me quedaba dormida activé una alarma para las cinco de la mañana. Pues bien, media hora antes de que sonara me desperté, miré el reloj y pensé “es hora de levantarse, mi Pastora me está esperando”. Al poner los pies en el suelo sentí un escalofrío intenso que me llegó al alma y también pensé, “mi amiga también me está esperando, es el cumple de su niña y se quedará esperándome toda la tarde, mi amiga, la que comparo mil veces con la hermana que se me fue, la que siempre está ahí, la que nunca me falla, aquella con la que en agosto juré que haría el camino de vuelta, la misma a la que hace dos días dije que no tenía ánimos de ir al traslado ¿cómo iba a irme sin ella?¿cómo iba a dejarla esperando?
Y resulta que…..como las cosas pasan porque tienen que pasar……..mientras a mi Virgen le tapaban la cara al amanecer entre vivas y sonidos de escopetas yo estaba en casa, llorando, con un boli en la mano y sobre papel mojado escribía estas letras.
Supongo que desde lo más alto comprenderán que aunque me arrepienta durante siete años, no podía hacerlo y que en este caso el valor de la amistad también puede verse como amor a la Virgen. Perdóname……..te debo una Rocío, mi Rocío.
Un poco de música
Buenos días, esta vez como podéis ver, no os traigo una fotografía, os traigo un vídeo de mi actuación en la fiesta de los sentidos que tuvo lugar en Almensilla el día 10 de Mayo, y a la que fui invitada para interpretar una pieza " O Mio Babbino Caro", gracias a la escuela de música, un evento organizado por el Área de cultura del Ayuntamiento de Almensilla, espero que os guste, esto es solo una muestra musical de lo que allí se hizo. Gracias por pasar
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